CON REFERENCIA A LA EXPOSICIÓN EN GALERIA PRO-ARTE DE ÓLEOS de Carlos Sotomayor (1956)

Por Víctor Carvacho, (1916-1996) Crítico e Historiador de Arte, Académico Bellas Artes, U.de Chile.

Los artistas con recompensas mayores o menores abundan. Lo que constituye una rareza y por lo mismo una de las causas de su escasez, es que se encuentran artistas con ese algo mágico, intransferible, propio y revelador. Podemos mencionar a Luis Herrera, Pedro Luna, Juan Francisco González y Juana Lecaros. Carlos Sotomayor pertenece a este género y su pintura tiene algo que el análisis no puede aislar ni acepta tampoco transferencia literaria alguna.

POR QUÉ CARLOS SOTOMAYOR

(en relación a la misma Exposición en Pro Arte)

Por Eduardo Anguita (1914-1992), poeta y escritor chileno. Premio Nacional de Literatura 1988. Crítico de Arte.

Hay dos maneras de ser humano en el arte.: utilizando la naturaleza y utilizando solo los elementos abstraídos por el hombre. Por ambos caminos se podría pecar de inhumanos, a pesar del axioma. ¿En qué consiste pues la humanidad de Sotomayor, tanto en su anterior pintura abstraccionista (me refiero a la obra exhibida antes de 1951) como en ésta, donde el artista absorbe formas y savias voluptuosas de la naturaleza.

Cuando Sotomayor hacía pintura abstraccionista, lo hacía con fines estratégicos: él quería volver a re-crear la creación, para lo cuál debía descomponer, eliminar, escoger, recomponer, según un sentimiento humano, humanísimo, que quiere asumir plenamente esta facultad mental consistente en captar la realidad según mi imagen y semejanza. Entonces Sotomayor era humano en su arte por su actitud antropocéntrica.

Ahora, en el reflujo de su conducta estética, con una imagen más nítida de la propia melodía, se sumerge en los mundos naturales, los mundos en plural, porque aquí aparece con alucinante resplandor oscuro, el hombre natural Sotomayor, con sus paisajes internos y externos, en un acorde subjetivo-objetivo que emociona profundamente, como si por primera vez viéramos el mundo en tres dimensione: el afecto ha intervenido en esta última etapa de su pintura y le ha dado volumen sentimental a qué otro suyo anterior, un poco espectral, que admiramos en sus pasadas exposiciones. Su obra se me aparece ahora más rica de sustancia existencial, más voluptuosa, más Plurívoca. Tal vez es más discutible, pero es también más existente.

En una palabra, ha creado no solo figuras: ha creado seres

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